He estado con un Fiat Ducato L4H3 y he visto algunos problemas comunes. El motor no siempre arranca bien a veces, especialmente cuando está frío. ¿Alguien más tiene esto? Yo pensé que era el sensor pero resulta que era el bombín de arranque, cambio fácil.
El aire acondicionado se va en verano a veces, se queda frío pero luego no hace frío. ¿Alguien sabe por qué pasa? Yo revisé las mangueras y parece estar todo bien. Quizás es el regulador, ¿has revisado eso?
Y la suspensión delantera, en curvas fuertes hace ruido como si algo chocara en el interior. Lo revisé, parecía el soporte del amortiguador. Cambié eso, y ya va bien.
Si alguien tiene trucos o experiencias similares, cuéntame porfa.
En Monterrey, nuestro Fiat Ducato L4H3 da problemas de suspensión frecuentes. Aunque un dolor de cabeza, mucho se soluciona con ajustes y mantenimiento regular. Algunos amigos incluso lo reparan por su cuenta para ahorrar. ¡Vamos que se puede!
En La Habana, mi Ducato L4H3 me jugó una mala pasada con el aire acondicionado. Parecía que tenía vida propia y, claro, en el calor tropical era una tortura. Mis colegas dicen que limpiar el desescarchador solía resolver el problema de vez en cuando. Otros percalos habituales son con las precargas del motor y el diferencial, pero con paciencia y un mecánico fiable, lo solucionamos siempre. Chachalaca alguna vez más, consejos siempre bienvenidos.
En Monterrey, andaba con mi Ducato L4H3 y ¡zas! el turbocompresor se cayó. Busqué ayuda y averigué que es común la filtración de aceite. Resulta que unas bujías sucias y una revisión del turbo resolvieron. Aprendí que un chequeo regular es clave, sobre todo para estos rusitos que somos varios los que pasamos por esto. ¡Ojo con los manguitos!
En Murcia, mi Fiat Ducato L4H3 tuvo un problema de inyección, muy molesto en plena ruta. Un amigo mecánico me ayudó perfilando las bujías y señalándome qué líquidos revisar. No es la primera vez que esto sucede, pero se soluciona con paciencia y algo de mano de obra. ¡Cuidadín con la temperatura!
En Monterrey, mi Fiat Ducato L4H3 tuvo un problema con el compresor del aire. Al final, resultó ser una válvula obstruida. A otros les ha sucedido, pero cambiando eso y dándole un buen mantenimiento preventivo, volvió a la normalidad. ¡Cuidadao con eso!
En la Ciudad de México, mi Ducato L4H3 tuvo problemas de sobrecalentamiento. Resulta que era un filtro de aire sucio. Después de una limpieza, ya no da fallos. ¡Cuídense esas mafaldas y mantenlas bien!
¡En Arequipa, mi Fiat Ducato L4H3 ha tenido sus altibajos! Principalmente problemas con los frenos—chocar contra algo y se decolora medio escape. ¡Ay, la transmisión también falla a veces! ¡Cosas así le pasan a casi todos aquí! Algunas soluciones que encontré: revisa los frenos regularmente y lleva el carro al mecánico habitual, ¡un buen ángel tiene que estar vigilando todo eso!
¡Qué locura el Ducato! Aquí en la Ciudad de México, muchos reportan problemas con el aire acondicionado, especialmente en verano. Una vez, me tocó esperar tres días por la reparación. Pero al final, con algunos ajustes internos, mejora bastante. Lo bueno es que tiene espacio chido para equipaje, ¡asequible y práctico!
Acá en Madrid, siempre escucho de problemas con el Ducato L4H3. Un colega tuvo ese tema de la fuga de refrigerante, y la solución fue reemplazar la junta de la culata. Es un coche bestial, pero requiere su mantenimiento estrenizo. ¡Muchas veces, los pequeños detalles son los que dan calambres!
Aquí en Ciudad de México, el Fiat Ducato L4H3 no es ajeno a problemas de suspensión que causan temblores. ¡Un compañero mencionó recientemente que cambiar los amortiguadores resolvió el asunto casi al instante! ¡Definitivamente algo a considerar si enfrentas lo mismo!
En Valladolid, mi Ducato tuvo problemas con el refrigerante y un ruido extraño del motor. Resultaron ser el radiador y el cojinete del cigüeñal. Cada vez que leí sobre estos fallos, supe que estaba preparado y ahorré algo de pasta llamando rápidamente a un mecánico. ¡Así de complicado es el jodido coche!
En Valencia, alguien me decía que el Fiat Ducato L4H3 tiene fallos de dirección asistida. Yo cambié las mangueras y se solucionó. Otros dicen que el turbo falla. Acá muchas soluciones informales y arenales. ¡Se pasa, pero se lleva muy bien!
En León, hemos visto que el Fiat Ducato L4H3 tiende a tener problemas con la succión al arrancar, especialmente en climas fríos. Un truco funcional es revisar regularmente el inyector de combustible. Creo que mantenerlo al día evita más dolores de cabeza. También he notado que el termostato se desgasta rápido; procura cambiarlo antes de que sea tarde. ¡Buena suerte!
En Barcelona, mi Ducato L4H3 tuvo problemas de calefacción, especialmente en invierno. Descubrí que era el termostato, totalmente obsoleto. Cambiarlo solucionó el problema. Algunos amigos mencionaron desgaste en la dirección asistida. No subestimes el mantenimiento preventivo. ¡Cuídas esos kilómetros!
Aquí en Montevideo, mi Fiat Ducato L4H3 dio una lata con la inyección. Pude arreglarlo con algunos grupos de mariposas y ya anda. A los demás, revisar bien esas bobinas si dan piques. ¡Cuidado con las fallas en las bombas!
Acá en Santiago, mi Fiat Ducato L4H3 tuvo problemas con el aire acondicionado. Cambié las mangueras y solucionó el problema. Otros han tenido fallos con la distribución. Cuidado con no cambiarlos a tiempo, ¡eso es una cagáña!
Viviendo en Madrid, el Fiat Ducato L4H3 es bastante versátil, pero te topas con problemas, especialmente con el sistema eléctrico y los frenos. Yo ya cambié dos bombas de freno y se me trastocó el alternador más de una vez. Supongo que ayuda tener buenos mecánicos. Hay q estar atento porque el día de mañana podría pasar de todo sin avisar. Mantén tus ojos bien abiertos y dale caña con el mantenimiento preventivo. 
En Medellín, mi avanzado Ducato cracó en pleno centro, esas famosas averías eléctricas. Un colega me arregló rápido; debe ver siempre el fusible y el cableado. Lo importante: estar preparado.
En Badajoz, escuché de un colega que su Fiat Ducato L4H3 tuvo problemas con el aire acondicionado llorón. Resulta que era un manguito goteando, ¡solomillo! Pero el tema de los neumáticos rodando injustos fue lo peor. Cambiaron las ruedas y pasó la ITV sin más trastadas. ¿A alguno más le pasa con el tema de la placa antipolución que no reconoce nada como derecho? A veces parecemos hackers en desesperación. ¡Agarraos!