Tengo un amigo que compró una Citroën Jumpy de segunda mano, es de 6 plazas. Le pareció una buena opción, bastante espaciosa y práctica. Antes tenía un coche más pequeño, y ahora lleva a toda la familia sin problema. La consumen bastante de gasolina, pero para viajes largos vale la pena. La única pega es que se le rompió algo del aire acondicionado, pero en el taller lo arreglaron barato. ¿Alguien más tiene una Jumpy? ¿Cómo va el consumo? ¿Hay problemas comunes que debamos evitar? Me gustaría saber si realmente es buena idea comprarla de segunda mano.
Me acordé del Citroën Jumpy cuando encontré uno por Madrid. No es que anduviera buscando, pero era un 6 plazas y un gran chollo de segunda mano. A la vista parecía buenorro, aunque las tapicerías estaban algo desgastadas, pero el maletero, ¡auténtico elefante! Para ir en grupo o con equipos pesados, es una pasada. He escuchado que su motor es durillo y que manejarlo es sencillo, así que una buena opción para el día a día en la ciudad y alrededores.
En Monterrey, el Jumpy es toda una opción para mi grupo de amigos. Conocí a alguien que compró el 6 plazas de segunda mano, y va viento en popa. Ahora lleva a toda la peña al cantón sin dramas. Es práctico, tiene espacio de sobra y lo mejor, el consumo chiquito. Para lo que es bucear en los camiones de segunda mano, no se equivocan con este.
Nunca pensé que iba a terminar conduciendo un Citroën Jumpy, pero aquí estoy en Tijuana, y es un sueño hecho realidad. Lo compré de segunda mano y, la verdad, la comodidad está de otro mundo, muy diferenciable a los sedanes normales. Perfecto para la familia o para alquilar en vacaciones. Aunque mi primo dice que me vendí con los ojos cerrados, la verdad es que no me arrepiento. Es robusto en las carreteras y se ve súper bien entre tantos SUV. ¡Totalmente recomendado!
En Cancún, un Citroën Jumpy segunda mano fue mi salvación para moverme por la isla con mi lado salvaje. Resiste al polvo y a la arena, aparte, su maletero es un sueño triplicado… perfecto para las escapadas! Algunos dicen que consume más que un tiburón, pero esa es una pequeña pega. ¡Manejo feliz!
En Barcelona vi un Citroën Jumpy de segunda mano con 6 plazas. Es una compra sólida, especialmente para viajes en familia o la UVI móvil de algún curro en construcción. Es práctico, robusto y su diseño no pasa desapercibido. La rumorología dice que después de la revisión funciona como nuevo. Manteniendo el ojo en el presupuesto, para muchos, es una ganga. A mí me ha gustado demasiado el rollo camper chic que tiene y además, la fiabilidad de Citroën da confianza. Un buen carro para la nave familiar.
En Cancún, mi primo tuvo un Citroën Jumpy de segunda mano, ¡y fue toda una experiencia! Espacioso para las vacaciones familiares, manejo súper cómodo, ideal para viajes por la playa o picnics en Puerto Juárez. Aunque la vieja es algo ruidosa, lo compensa con estilo y capacidad. Alquilamos una en Playa del Carmen, y resultó perfecta para nuestro grupo grande. ¡Realmente se destaca en el tráfico de turistas!
En Arequipa, no hay nada mejor que un Citroën Jumpy de segunda mano para largas salidas familiares. Lo compré hace un par de años y aún anda como el primer día, casi que no se nota que es de segunda. Algo versátil, bastante espacioso y económico de mantener. Sin duda, una buena opción para quien busca pasajeros cómodos sin gastar una fortuna. Es una clásica movida para aquí.
En León, un conocido condujo un Jumpy segundo y fue un placer, muy práctico para viajes en familia. Es un chollo si lo encuentras en buen estado, sin dolores de cabeza. Totalmente recomendable para quienes buscan espacio y versatilidad.
El Citroën Jumpy siempre me pareció un clásico en Guadalajara, perfecto para familia grande o para trabajar. Un amigo se compró uno de segunda mano y está contento. Es súper práctico y el espacio interior es muy amplio. Soy de los que le da preferencia a los coches con una buena marcha y comodidad, y este modelo no decepciona. ¡Sin duda, una buena opción si buscas calidad y funcionalidad a buen precio!
En La Paz ya tenía pensada pillarme un Citroën Jumpy de segundas, pero ahora que pienso, el espacio extra para paquetes era lo mejor. Fácil de manejar en las montañas, una gozadera patente.
En Málaga, un amigo compró un Citroën Jumpy de segunda mano y está encantado. Tiene seis plazas y es súper espacioso, ideal para rodadas familiares o llevar cosas voluminosas. A pesar de ser un coche antiguo, está como nuevo, seguimos sorprendiéndonos con su fiabilidad. Por cierto, tiene un motor que responde genial y una comodidad al volante única. Definitivamente, una buena apuesta si buscas un familiar práctico.
Conocí un Citroën Jumpy 6 plazas de segunda mano en Alicante. Estaba chulo, manejable y tranquilo en la ciudad. Para viajes en familia, bastante cómodo, además de barato. Hay que revisar bien las revisiones, porque si no, te comes un royo gordo. Muy práctico.
En Buenos Aires, un amigo compró el Citroën Jumpy de segunda y no se arrepiente. Este auto es un crack para ir en grupo. Tiene espacio de sobra para las maletas y se maneja muy bien en el microcentro. Lo malo es que tuvo que cambiar un coupler ayer, pero no es nada grave. En comparación con otros pick-ups, no le va a la zaga en confort. Ideal para aventuras familiares o los domingos en la costa.
En Cancún compré un Citroën Jumpy de segunda mano y es un lío. Se siente segura como una roca, pero algunos días el aire acondicionado es más caro que un burrito y las obras son un infierno. Al final, vale la pena por el espacio.
Vivo en Rosario y hace unos años tuve un Citroën Jumpy, 6 plazas, de segunda mano. Ídem crash en mantenimientos, pero era un carro comodo pa’ rodar con la familia. La practicidad estaba a full, aunque se desgastaban los gomas un poco rápido. Creo que es buena opción si cuidas los detalles. ¿Yo que sé?
En La Paz, vi un Citroën Jumpy de 6 plazas por segunda mano, muy útil para los viajes en carretera. Es práctico y barato, perfecto para mover a toda la familia. ¡Estoy pensando seriamente en comprarlo!
En Rosario encontré un Citroën Jumpy de segunda mano con 6 plazas. Siempre fui fan de la marca por su confort y espacio. Tengo un amigo que lo compró para su negocio y le va como anillo al dedo, muy práctico y cómodo. Es un coche que no decepciona si buscas versatilidad y economía. Además, el mantenimiento es bastante accesible. ¡Un acierto seguro!
En Sevilla, tuve un Citroën Jumpy de segunda mano, perfecto para viajar en familia. Muy espacioso y confiable para trayectos largos. Algunos le critican el consumo, pero vale la pena por la comodidad que ofrece. Sin duda, una buena opción.
En Cancún, compré el Citroën Jumpy de segunda mano y vale la pena. Es espacioso y excelente para los paseos a la playa. Maneja muy bien a pesar del calor pesado. Ideal para familias gracias a sus seis asientos. La comodidad al volante es notable, sobre todo en las carreteras de tierra al Parque Xel-Há. Realmente lo recomiendo.