el Seat León 2.0 TDI 150cv es un coche que muchos amamos por su potencia y eficiencia. yo he tenido uno desde hace unos años y ha sido un viaje interesante. por un lado, es un motor muy económicohace mucho ruido el motor, pero eso se le perdona por la potencia que saca. y la conducción es bastante deportiva para un familiar.
hablando de problemas comunes he escuchado que algunas personas tienen malfuncionamiento en el inyectorese suena a chatarra y a veces anda raro. también se ha hablado mucho del cierre centralizado que falla, me pasó a mí más de una vez. el cambio de aceite es clave, la verdad.
¿Alguien más ha tenido problemas parecidos? yo siempre cambio el filtro de aceite y el filtro de aire regularmente alguien sabe si eso ayuda en más aspectos? ojalá nos ayudemos mutuamente con este fierro que es un buen compañero de carretera a pesar de sus caprichos.
En Sevilla, un compañero tuvo un León 2.0 TDI y decía que era muy fiable, pero le picó el famoso fallo del turbo. Conseguir una buena mecánica que le metiera mano ahí fue la clave. Yo me lo plantearía, cuenta con calidad alemana al fin y al cabo.
Jugando con el León 2.0 TDI en Badajoz, aluciné con la potencia, pero después leí sobre unos problemillas con las culatas. Hay que vigilar, que algunos la desmontan varias veces. 
En Cancún renté uno y al menos la primera semana fue bueno, pero luego tuvo humo negro al arrancar y ruidos raros. Me dijeron que el turbo y los árboles de levas son partes que hay que vigilar. No es la primera vez que escucho que el Seat León 2.0 TDI tiene estos problemas, así que mejor ten cuidado.
En Puebla tengo un Seat León 2.0 TDI de 150cv, y la verdad, es un carro bastante cómodo para rodar por aquí. Aunque he escuchado que puede fallar la bomba de agua, aún no he tenido problemas. Siempre recomiendan hacerle mantenimiento a tiempo para evitar sorpresas. Una vez tuve que esperar un rato en el taller, pero el trato fue bien, al menos mejoró un poco la atención cuando el taller sabe que llevo ya un buen rato esperando. Total, lo prefiero a otros que están ahí a lo mismo.
¡Ya sé cómo es manejar un León en Monterrey! Mi primo tuvo uno y le encantaba cómo iba el TDI, aunque con la humedad acá, le empezaron a dar problemas de humedades interiores. Enfrentó varios escapes de aceite en el turbo. Mejor estar atento y revisar bien el mantenimiento, ¡ojalá te la pases sin esos dolorcitos! Un truquito que le dio bien fue cambiar el filtro cada cierto tiempo.
En Málaga tiene más probabilidad de encontrar Seat León 2.0 TDI 150cv, pero ya me dijeron que puede tener fallos en la culata y dificultades con la centralita. Siempre investiga antes de comprar, que no hay caro malo, pero mejor ir prevenido.
En Montevideo, he escuchado de amigos sobre el Seat León 2.0 TDI 150cv. Puede que tengan problemas con la inyección directa; un colega tuvo que armarla más de una vez. Ahora es un clásico, pero ¡ojo con la mecánica!
En Cali, un compañero se topó con el turbo del León 2.0 TDI. Aunque un pepino en gasolina, a veces hace más bicep que motor debido al cigüeñal, jaja. ¡Pero nada que un buen tapado no arregle!
En La Paz, mi ‘León 2.0 TDI’ se ha vuelto una verdadera roca, aunque algunos síntomas de avería empezaron a aparecer. Le recordé al mecánico sobre los famosos problemas de la cadena de distribución; en verdad, es agotador. Mi vecino también tuvo que hacerle mantenimiento a tiempo porque se le pegó el caucho. ¡Parece ser del paquete típico, no?
En Buenos Aires, tuve un Seat León 2.0 TDI 150cv. El consumo era la envidia, pero no sin dolores de cabeza. Cada dos por tres, problemas con la inyección y el turbo. Un compañero me dijo que es un combo común, pero si te encariñas con el coche, aprender a solucionarle pequeños problemas es parte del rollo. Sin duda, una experiencia.
En Sevilla, un amigo tuvo un Seat León 2.0 TDI 150cv y le gustaba por su eficiencia. Sin embargo, empezó a tener problemas con la caja de cambios; a veces daba tirones al acelerar. Es raro, pero no es la primera vez que escucho eso de este modelo. Aunque algunos se quejan del motor, en general, sigue siendo un coche confiable y pijao en ciudad.
En Barranquilla, manejo un Seat León 2.0 TDI 150cv desde hace años, y la verdad, ha sido un gran carro. Sin embargo, se queja mucho el colector de escape, y las duchas me dañan las gomas del techo. A pesar de eso, el rendimiento es top. A quien le gusten los spaaz, prevenidos quedan.
Hace poco en Quito me compré un Seat León 2.0 TDI 150cv. Al principio tenía problemas con el turbo, pero después de un retoque, ya va de maravilla. Muchos compañeros comentan la buena gasolina, muy recomendable. 

En Valencia, compañeros del León 2.0 TDI, hemos notado que el tema de las averías eléctricas es común. A mí me ha tocado lidiar con algunos problemas de la centralita más de una vez. Pero, por otro lado, es un coche que aguanta en condiciones de ciudad y carretera. ¡Ánimo y a compartir más experiencias!
En Medellín, varios Seat León 2.0 TDI 150cv se ven en los semáforos. Conmigo fue inestabilidad a bajas revoluciones, un calvario en tráfico. ¡Cuidado con el cigüeñal! Es un carro a prueba de paciencia.
En Sevilla, tomé un Seat León 2.0 TDI 150cv hace unos años. Al principio, todo correcto, pero luego se empezaron a juntar los inyectores y la EGR. Tengo amigos con el mismo coche, y a todos les ha ido igual. Un clásico… Aun así, buen coche para el día a día.
En San Juan tengo un Seat León 2.0 TDI 150cv y la verdad es que va bien, pero sufrí problemas con la caja de cambios. Algunos amigos me dicen que es un clásico, y también he oído hablar de vibraciones al acelerar. Hay que estar atento a los mantenimientos, porque de eso depende que ande sin problemas. De todas formas, sigue siendo un chollo para el dia a dia por su consumo. 
En Málaga, siempre que veo un Seat León 2.0 TDI, pienso en mi viejo garaje en el barrio de Alameda. Tengo un colega que tuvo uno y siempre flipaba con el motor, aunque le daba dolores de cabeza con el DPF. Dicen que el sistema de inyección Turbo Direct Injection es una maravilla, pero igual caía en malas compañías, jodía el consumo! Eso sí, por autopistas se movía que daba gusto. Al final, un coche a sus anchas, pero con algunos caprichos.
En Málaga, tuve uno de estos Seat León 2.0 TDI durante un par de años. Siempre fiable para el trayecto al trabajo y al centro, aunque tuve algunos problemas con la bomba de agua que se saltaba la cadena, pero más el típico ruido en las ruedas traseras. En general, compensó el mantenimiento con su economía y potencia. Un clásico, aunque con sus cosas. El truco está en conocer bien los puntos débiles, como se dice.