Claro, la primera vez que manejé el Tesla aquí en Tijuana, flipé con el volante. Tan mínimo, pero increíblemente controlable. Con tantas funciones en pantalla, se siente futurista. Es como estar al mando de una nave espacial en modo conducción, super cómodo para largas distancias. 
En Asunción, tuve la oportunidad de manejar un Tesla y el volante es super raro ¡de frente! Yendo de reclame a Itauguá, la sensación es única, se siente futurista. Aunque al principio parece extraño, uno se acostumbra rápido. La posición es incomparable y te sientes parte de algo cyberpunk, sin contar las manos libres del piloto automático. ¡Una experiencia distinta!
En Badajoz, probé el volante de Tesla y es super cómodo, como si lo estuvieras acariciando. Sientes que te conectas más con el coche, como si fuera un partner de conducción. ¡Totalmente recomendable!