tengo un peugeot 209 y últimamente está dando dolores de cabeza. pensé que era cosa del aceite pero seguía igual. finalmente descubrí que era la bomba de gasolina. ¿A alguien le ha pasado? cambie la bomba y ahora va mejor. también le hice mantenimiento al sistema de frenos porque noté que se ponía pesado al frenar. ¿Tienes problemas con los frenos? en mi barrio, varios tenemos peugeot 209, todos tenemos nuestras historias de problemas y soluciones. uno insistía en que era el carro viejo, pero al final era la correa de distribución. ¿Alguien sabe cómo reconocer eso a tiempo?
En La Coruña, tras varias averías en mi Peugeot 209, probé cambiar el filtro de aceite así sin ir al taller. Notable diferencia ¡está más fresco! Ya ha sido un viaje, pero mi viejito sigue rodando. Estoy seguro de que otros foreros también tendrán trucos. ¡Compartimos datos y a seguir así!
¡Qué experiencia tener problemas con el Peugeot 209! Acá en Valladolid, todos los tenemos al menos un amigo que lucha contra el mismo gusanillo. Suelen ser problemas con la inyección o el aire acondicionado. Yo, una vez, me quedé tirado a la vera de la Calle Mayor, pero después de algunas horas de estar allí me arreglé. ¡A veces es cuestión de paciencia! Y ya ves que el 209 aguanta mucho.
¡Pues sí, los problemas del Peugeot 209 son legendarios aquí en San Salvador! La mía comenzó a fallar luego de un guacho en un charco, y eso que solo lleva pocos kilómetros. Nadie se explica cómo con ese segundero tan grande, el ruido del motor parece un sopapo de mono caliente. Pero la verdad, una vez que a eso le agarras el truquillo, es un carro basto y funcional. ¿Alguien más tiene la paana de cómo mantenerlo en forma?
¡Joder, a mi también me pasó con mi 209 aquí en Zaragoza! Estaba el motor enfrascao y tuve que desmontar media culata para pillar el problema. Encontré ayuda en un foro de coches antiguos. Sorprendentemente, los consejos de la gente de esos foros son oro. Les pasó a todos al menos una vez. ¡A los que tienen el mismo problema, no se rindan y que no cunda el pánico!
En Barranquilla, ni el chapo duro que te mueves en este, ha dejado de dar problemas mi Peugeot 209. Pareciera que el calor le dispara la creatividad a las averías. La semana pasada perdí dos bocinas, y ahora cuando el aire acondicionado decide apagarse, parece el peor verano de todos. Pero así es la vida, tú y el carro siempre juntos en las buenas y en las malas. 
¡No estás solo! Yo también tuve jaleo con el mío aquí en León. El motor hacía ruidos de mascar chicle y dejó de arrancar dos veces en semana santa. ¿Marca de aceite rara? Era eso, mi vecino y el mismo mecánico me dijeron lo mismo. Cambié y ya va como nuevo, al menos por ahora. Cuídate y no te vuelvas paranoico, a veces es un mal chicuelo y no el copiloto.
¡Vaya, yo viví eso mismo con mi 209 en Quito! Un día me quedé tirado en el Filo del Tranque, en plena subida. Resulta que el ruidito raro venía del motor y, claro, le dio fallo completo. Después de llevarlo al taller más cerca, me dijeron que era el distribuidor. ¡Qué anécdota! A veces, esas viejas le tratan mejor de lo que piensas, pero hay que saberlos cuidar. No te recomiendo buscar andar susando en el clima de aquí, que ya no es lo mismo como en otros lados. Saludos a todos los que manejan su clásico, ¡ánimo con el mantenimiento!
¡Ay, qué sabroso recordar a mi viejo 209 estacionado en una cochera en La Habana! Siempre me daba algunos problemas, pero aprendí a lidiar. Una vez, casi se me cae encendido en el parque. ¡Vaya! Lo que más me gustaba era el sonido del motor, aunque en esas épocas era un dolor en el alma encontrar repuestos. ¡A todos los que están ahí, sigue arreglándolo y disfrutando el viaje!
¡Yo viví algo parecido con mi Peugeot 209 aquí en Guadalajara! Un día, empezó a hacer estallidos raros en cuanto encendía. Al final era algo del motor, pero después de unos cuidados pormenores con el mecánico, volvió a correr como las primeras veces. A veces, es cuestión de paciencia y encontrar a alguien que sepa de estos tan queridos clásicos. ¡Ánimos, compañeros!
En Buenos Aires, siempre es una lucha mantener el Peugeot 209 encendido. El carburador parece más jodido que nunca, y es una pija llevarlo al taller. Pero después de hacerle un tuneo al filtro de aire, mejora un montón. ¿A alguien más le pasa esto? Te dejo un examén visual y toca ajustar ciertas cosas.
¡Oye, a mi Peugeot 209 también le costaba arrancar cuando vivía en Murcia! Parecía que se le había ido el sembrado. Al final, resultó que el motor estaba haciendo tiempo por culpa de la bujía. Cambié la bujía y el filtro de aire y ¡zas!, como nuevo. No es raro que estos coches te den calabazas si no les damos mantenimiento. Cuidarlos solo cuesta un poco de tiempo y cabeza.
¡Oye, también tengo problemas con mi Peugeot 209 aquí en Quito! Me recuerda a las largas colas en los semáforos de Mariscal. Parece que la transmisión se da floja. Algunos dicen que es normal con las rutas de pista. A ver si alguien tiene un trapito mágico para estos casos. ¡Suerte a todos con el carro!
Tuve problemas con mi Peugeot 209 en Asunción hace un tiempo. El motor se me quedaba sin fuerza después de patinar en lluvia. Al final, resultó ser la bomba de combustible. Cambiarla solucionó todo. Antes de meter la pata, revisa el tensor de la correa y purga bien el sistema. Así les ahorras un curro.
Recuerdo mi viejo Peugeot 209 en Badajoz; era una leyenda en la ciudad. Siempre daba tumbos pero daba la talla. Intenté cambiar las bujías y me salió como la leche el tema de los inyectores. Mis manazas de mecánico. Consiguieron solucionarlo al final, pero una experiencia digna de contar cerveza. ¡Qué tiempos!
En Badajoz, mi Peugeot 209 da tantos problemas que casi parece parte de la familia. En bastantes ocasiones se cuela aceite y parece más un establo que un coche. Cada viaje es una aventura, pero las soluciones intuitivas ayudan, ¡hasta que el mecánico nos hace morder el polvo!