Man, en Badajoz tuve uno de esos días con mi Mercedes Clase A del 2004. Al parecer, un tomacorriente se armó. La otra vez, justo cuando pensé que estábamos en llamas, al final resultó ser solo un fallo en el aire acondicionado. Pero ya ves, siempre va teniendo algún drama. A veces pienso si esos malditos airbags son más problema que solución con estas máquinas. Al final, sigue siendo mi trotamundos en la carretera.
En Quito, mi Mercedes Clase A 2004 tuvo problemas con el aire acondicionado, pero repararlo dio una segunda vida. A veces, los autos están manchados, pero cuentan historias.