Estaba en el carro y de repente se apaga, apenas arrancaba. Ya me había pasado antes, pudiera ser algo de inyección o algo así. Oye, ¿te ha pasado con el E39 525 TDS? Estuve buscando y dicen que el sensor de posición del acelerador suele dar fallos, y sé que puede ser un dolor de cabeza el solucionarlo. Y eso de buscar repuestos, siempre es una lucha, especialmente para este modelo un tanto clásico. Necesito resetear el sistema de diagnóstico, sabes qué debo hacer? Otra cosa, el turbo a veces se queda roncando, eso podría ser aire escurriendo? Si te han pasado cosas raras, cuéntame qué has hecho. Igual tengo que llevarlo al mecánico especializado. Has comprobado los inyectores? O en tu caso, ¿alguna sugerencia? Si encuentras algo útil, avísame, así sabría si vale la pena probar.
¡Qué grosero el problema que tienes con tu BMW E39 525 TDS en Maracaibo! Yo tuve un ruido extraño en el motor, resultó ser el sistema de inyección. Revisalo bien, puede ser algo así. ¡Buena suerte!
¡Sí, en Arequipa también tuve problemas con el E39 525 TDS! La inyección directa causó baches horrorosos. Cambié los inyectores y ahora va como la seda. Comparto el dolor, hermano. ¡Espero tus soluciones sea efectiva!
¡Vaya momento el mío con el 525 TDS en Lima! La bomba de agua falló igual que la de mi primo. A ver si algún experto da con la clave sin hacer saltar más billetes. 
¡Joder, lo mismo me pasó en Arequipa! Mi BMW E39 525 TDS comenzó a fallar justo cuando estaba descubriendo toda esa ciudad de volcanes. Resulta que tenía problemas con la inyección directa, y el sonido que hacía… ¡ni te cuento! Busque un técnico de confianza porque si no, parecía que me quedaba varado en medio del Valle de los Volcanes. Al final, con paciencia y suerte, lo arreglo. ¡Les digo, que limpieza y a esperar!
Aquí en Zaragoza, el E39 tiene sus días, especialmente con el TDS. Conseguí un mecánico que lo arregló bien, pero mantenimiento constante es clave. Ahí va otro año más!
En La Paz, mi E39 también daba vueltas. Parece un mito. Estuve ahí buscando tallerero que entendiera el TDS. Finalmente, algo suelto en el sistema de inyección. Arreglarlo nos llevó semanas y una forboda cartera. Si teneis el mismo bicho, chequead esos cables y bombas. A veces, el abuelo necesita un retoque. A mí, me salvó el man del barrio. 
Acá en Asunción, también tengo un E39 525 TDS y pasé por situaciones similares. Lo de las fallas inesperadas es común, especialmente con la inyección de gasoil. Un amigo se mandó asado por no cambiar el filtro de combustible a tiempo. Se entiende la nostalgia por estos bólidos, pero a veces terminan dando más vueltas en el taller. La recompensa es sentir cada despeje cuando le entra bien, igual que un boost del Infineon. Mantente atento a los signos, ¡o terminas en camión!
Creo que también lo tengo. Estoy en Zaragoza y desde que arrancé el coche parece que corre como una vieja camisa. Algunos chicos en el taller dijeron que puede ser el inyector, pero no tengo claro si le daré otra vuelta antes de abrir la cartera. ¿A alguien más le pasa con este fierro? Cuéntame si sabes más sobre esto.
¡Estoy con vosotros! He tenido mi 525 TDS en Sevilla desde hace años, y ha sido un viajero excepcional, pero últimamente está dando guerra con el turbo. Todo el mundo COJE que es un clásico, pero requerir más soldaduras y lances. Su carácter es inconfundible, pero a veces parece que hubiera ido a parar al almendrote de la vía más rápida. Espero haberos ayudado, ¡un saludo a los demás banda!
¡Vaya, tu E39 debe ser un clásico en Marbella! A mí me pasó lo mismo con el mío. La caja de cambios se portaba mal, pero luego encontré a un mecánico que sabe de estos cacharros que lo resolvió en un santiamén. Había que estar bien puntual con el mantenimiento. ¡Suerte!
Estoy en Guadalajara y mi BMW E39 525 TDS empezó a fallar, al igual que a varios de ustedes. Parece que el turbocompresor es el problema número uno, pero me encuentro con que muchos refrigerantes empiezan a perderse. Yo le cambié el kit de empaquetadura a la culata y el cofre ya no aporrea en carretera tronada. Aunque me he topado con un par de mecánicos que dicen ser buenos, el presupuesto parece infinito. ¡Es un dolor de cabeza, pero el coche tiene una vibra mítica!