¡Uy, esto me suena conocido! En San Juan, mi jefe también tuvo problemas con el anclaje de asientos en su Renault Trafic. Al parecer, siempre falla justo cuando crees que va a funcionar. Supuestamente, algo se resbala entre el asiento y el marco. Lo peor es que puso cuñas para solucionarlo, pero sigue igual. ¿Alguien más con esta pesadilla en su día a día?
En Quito saqué el Renault Trafic y ¡cuidado! Los anclajes de los asientos traseros dieron su pieza. Estuve en una falda y la guita, quien sabe lo que pasaba arriba. Los golpes de bicitras con los amigos al final del día terminaron con una fiesta sorpresa en el vehículo. Claro que la seguridad es lo primero, pero pensar que algo tan simple como el anclaje de los asientos puede complicar la dinámica del viaje es una sorpresa amarga. Alguien más pasó por lo mismo?