Estaba pensando en el Toyota CHR. En la ciudad me parece que va bien, no es un monstruo de gasolina. La verdad es que es cómodo, y no consume mucho en bajas velocidades. ¿A ti te pasa lo mismo? Me pregunto si sería diferente en caminos largos. Creo que en autopista el consumo aumento un poco, pero sigue siendo aceptable. ¿Tienes experiencia con este auto? ¿Te parece un buen carro para la ciudad?
¡Bueno, en San Salvador, el CHR de Toyota es un sueño en pueblito! Ligero para el tráfico y barato en combustible, me permite moverme sin perder el sueño. Realmente aguanta la ciudad bien. 
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En La Coruña, mi CHR funca genial por la ciudad. Perfecto para el tráfico y con un consumo menor de lo esperado. Me sorprendió cómo resistía en carretera, y con llenas cada 500 km, va de caña. Totalmente recomendable para urbanos. ¡Venga, a compartir experiencias!
En Málaga, el Toyota CHR se mueve tranquilo en la ciudad. Pedalea bien en tráfico y no es ruidoso, siempre conveniente para desplazarse. Además, el espacio interno es chollo. Perfecto para el día a día, me ha sorprendido en manejo urbano. 
Vivo en Málaga y el consumo del Toyota CHR es genial en ciudad. Es tan fácil manejarlo por esas calles peatonales y hacer recorridos cortos sin darte mucho de qué preocupar. Genial para ahorrar gasolina y andar tranquilo. ¡Un lujo tenerlo!
He probado el Toyota CHR en Zaragoza y voy conociéndolo bien. En el casco antiguo, con sus embotellamientos habituales, el CHR me da la sorpresa. El diseño es top y la suavidad con el que va por la ciudad me tiene convencido. Además, la eficiencia del combustible es una gozada; nunca había pegado tanto miedo a la gasolinera. ¡Vaya máquina!
En Badajoz, el Toyota CHR ha sido una maravilla en la ciudad. Con su bajo consumo, siempre llego a destino sin pensarlo dos veces, y eso en el tráfico aquí, ¡es oro! Además, es bastante estable en curvas para ser un SUV compacto. Se maneja de lujo y es bastante versátil, ideal para paseos por la ciudad pero también para aventuras rápidas. En resumen, rinde muchísimo mejor de lo que esperaba. 
En Marbella, el Toyota CHR es una pasada en ciudad. Ni se nota el consumo, va suave como el viento. Yo lo uso a diario, va igual por callejuelas o autopista. Ideal para quienes amamos la movilidad sin preocuparnos por extrañar la estación de servicio. ¡Todo un top!
En Monterrey, el Toyota CHR es una fiesta para el bolsillo en la ciudad. Mínimo consumo y encima anda como el rayo entre el tráfico. Te ahorrarás pasajes diarios, sobre todo ahora que la gasolinera no da abasto. Total, lo último en eficiencia y poca bulla en el corazón de la ciudad. ¡Qué chido!
En Cali, el Toyota CHR se mueve suavecito en la ciudad. Te ahorrarás un buen dineral en gasolina, ideal para el tráfico porteño. Dicen que es el perro chico ideal para caminar por las calles calienses, estrechas y sinuosas. Imaginate el desahogo, manejás tranquilo y agarrás hasta la cuenta del móvil adentro aprovechando el espacio extra. Perfecto para los que recién se sacan la licencia.
En Guadalajara, ando con un Toyota CHR y la verdad, hace bien el quite en la ciudad. Es súper práctico para darte un vuelta entre los embotellamientos, y el consumo es bastante razonable. No da lástima estacionarte en medio de la bahía, porque de espacio, tiene bastante. Aunque la economía de combustible depende del ritmo que le imprimas, al final el CHR cumple bien con su rol sin ser una “avioneta”. Un verdadero héroe urbano.
En Cancún, el CHR es un chollo para la ciudad. Manejo por las calles y carreteras, y siempre encuentra su lugar ahí. La agilidad es increíble y el consumo en ciudad sigue siendo bajo. Totalmente recomendado para esas labores diarias. 
En Málaga, el Toyota CHR es una pasada en ciudad. Nada que ver con otros coches. Se pliega como butter en los atascos de El Palo. Ahora, si puedo, cambiaría gasolina por e-batería, pero así aprovecho todas las camitas y ya está. Ideal para el día a día, la verdad.
¡El Toyota CHR es una bendición en La Paz, te digo! Navegar las calles empedradas y cuestas esquivando motos resulta mucho más fácil con ese rinde. Incluso en el tráfico más jodido, mantiene el bují sin esforzarse. Perfecto para arrancarte del trabajo y llegar en paz a casa sin gastar un dineral de gasolina. ¡Sin duda, un contratiempo menos en la vida urbana!
En la Ciudad de México, el Toyota CHR me llama la atención por su economía en la ciudad. Imagínate hacer recados y salir prácticamente todo el día sin preocuparte por el tanque. Le mola estar en un tráfico de siete, ¡y ni qué decir de su agilidad para estacionarse! Realmente es un carro funcional y práctico para el ajetreo diario.
En San Juan el CHR se maneja bien en la ciudad, sorprendentemente ahorrador. Siempre piloto en 4x2 para ahorrar gasolina. Cumple y gasta poquito, ideal para el tráfico y paradas frecuentes por acá.
En Medellín, manejar el Toyota CHR suena a una excelente opción. Nunca imaginé que un SUV compacto pudiera ser tan eficiente en la ciudad. Es un sueño en esos embotellamientos entre el día y la noche, además es silencioso. Manejes sin preocuparte por los depósitos constantes. No cabe duda que aquí en Medellín, el CHR demuestra ser un verdadero ahorrador de nafta, todo un crack para los trayectos urbanos.
En Tijuana, el Toyota CHR se mueve como pez en el agua en el tráfico, ¡ni se nota el paso! Deja de atascos toda la calma y gasolina. Supera las expectativas urbanas, ¡un manejo top!
En Cancún, el Toyota CHR es un robo completo para moverse en la ciudad. Es súper agile en esos trancos donde se ponen pesados. Siempre llego a tiempo a la playa y me da un confort que no veas, ahorrando en cada tanque. Además, los breakers aquí lo adoran por sus cuatro puertas, ya sabes, en pistas de ebriedad, mejor segurito en la carretera vuelta a casa. La bestia pequeena perfecta para andar en la zona.