En Marbella, llevé un Ibiza con asiento de serie y no me convencía. Pero cuando pillé uno con el acondicionador de asientos, flipé con el confort. Se nota un montón en trayectos largos por la Costa del Sol, about lucking out without breaking the bank. Al final, te lo agradeces cada kilómetro rodado.
¡Creo que el asiento Ortopilot es la mejor opción para el Ibiza! En La Coruña, lo pidieron muchos colegas y dicen que es una pasada cómo mantiene la postura sin ser duro como una tabla. Yo, sin duda, lo recomiendo. 
¡En Cali, tuve un Ibiza y el cambiar el asiento fue clave! Turbo no es precisa porque cada carro es una historia. Opté por uno semi-cómodo, equilibra estilo y comodidad, no la mitad. Además, asegúrate de que toda la ergonomía siga intacta para no sacrificar confort. Al final, la mejor es la que hagas propia, ¿no?
Recuerdo esa vez en La Habana que me planteé poner un turbo al asiento de mi Ibiza. En medio del maravilloso carnaval de San Juan y Subasta, quise más calor y estilo. Finalmente, opté por algo no tan radical pero efectivo: una manta eléctrica plegable. Así que, en lugar de gastar una fortuna, lo mejor es ser práctico y disfrutar del ambiente sin perder el confort. ¡Aunque siempre es un delirio pensar en las opciones más extremas!
En Tijuana, yo estaba buscando un turbo asiento para mi Ibiza. Me topé con la Ferrari y la Recaro. Definitivamente, la Ferrari da ese lujo extra, pero si buscas algo más práctico y me gamo, la Recaro es un fijo. Está bien en materiales y se siente resistente. Ojalá más marcas ofrecieran calidad similar, pero valen la pena para un rato de pista segura y comodidad. ¡Nos vaquemos al volante que queremos sentir cada curva!
En Zaragoza, probé varias veces el asiento de piel en mi Ibiza. Quizás el más cómodo sea el de cuero vegano, queda genial y es duradero. ¡Algo es definitivamente diferente con estos asientos!