Oye, ¿alguien tiene experiencia con un Toyota Trueno AE86 de segunda mano? Estoy pensando seriamente en pillármelo. Mi primo tuvo uno y me contaba que era una bestia en las curvas, y que el motor sonaba increíble. Tuvimos un par de veces salida con su coche y no podía creerlo. Pero me pregunto si es fácil encontrar piezas para él o si es caro de mantener. ¿Alguien ha tenido algún problema con él? También, ¿vale la pena el esfuerzo solo por la experiencia de conducirlo? Un amigo me dijo que era más trastos que alegría por el tema de las reparaciones. ¿Qué opinan?
¡Es increíble ver un Toyota Trueno AE86 por estánbarato en Arequipa! Acá entre amigos siempre hablábamos de tener uno, dale Lamborghinis y Ferraris ancheta. Fueron las joyas para drift, una auténtica pasión. Me acuerdo de arrancar uno para no parar. ¿No dirías que más que un carro, es un sueño rodante? 
Nadie se lo puede perder.
En Madrid, vi un AE86 azul hace años, siempre sueño con uno viejo. La legendaria Trueno es un santo grial para cualquier japohead. ¡Es la joya rara que todos buscamos de segunda mano en los yaques!
Acá en Córdoba, ver un AE86 de segunda mano es como despertar un sueño de infancia. Inolvidable ese momento, el rugido en el barrio, esos tiempos inolvidables rugiendo en el corazón de cada fan. ¡Qué experiencia!
Recuerdo cuando vi uno en Maracaibo, parecía conservado y listo para las vueltas. La AE86 es un ícono, sin duda. Me encantaría pisar los pedales de uno cerca de mi terreno de infancia. Alguien sabe si ese que andan diciendo es bien auténtico? En Maracaibo seguro hubo noches que levantó el ánimo el rumor de contar con uno de estos en la calle. ¡Qué tiempos!
En Buenos Aires, siempre me topé con revendedores de AE86. Es como buscar una Perla Negra, pero vale la pena. Y cuando ves un Trueno en buenas condiciones, te rompes un poco el bolsillo pero sabés que fueo. ¡Es amor a primera vista!
¡Vaya, en Murcia apenas vemos uno de estos! Recuerdo en el Speed Village de Lorca quedar con amigos para dar unas vueltas, impresionante la puesta a punto que necesitan. Tengo un colega que consiguió el de un señor mayor que lo tenía guardado casi como oro. Vale la pena, aunque es sacrificio y mucho esfuerzo, ¡es una pasión pura! Hay alguno en venta y me has puesto los dientes largos.
¡Qué locura, a ti también te perdía el sueño en Alicante por un AE86! Recuerdo cuando lo vi por casualidad en un garaje, pintado de naranja fuego. La mejor racha que tuve buscándolo. Esos carros son una locura, siempre hay un chascarro. ¡No te pierdas la oportunidad!
¡Conozco a alguien en Murcia que tiene un Toyota Trueno AE86 de segunda mano! ¡Es increíble cómo aún rueda como nuevo! De hecho, pasé unos días de guarras en una quedada de drifters por la costa, y ver a ese coche en acción fue una pasada. Los años no pasan por él. ¡Una leyenda en dos ruedas, que merece un capullo en su nuevo dueño!
¡Vaya que sí, aquí en Alicante hablo con muchos fanáticos del AE86! Un colega me contó que recientemente encontró uno en segundo mano, en perfecto estado y sin restaurar. Me puse a palpar el volante igual que cuando era joven, ¡la sensación no cambia! Anda que no se extraña esos rugidos de motor que todos recordamos. Alguien que viva cerca, que nos ponga al tanto, ¡hay que asegurarse uno!
En Málaga, viendo un AE86 segundo mano me hizo nostalgia. Alguno se me despeinó por la carretera sin frenos cuando estaba de vacaciones ahí. ¡Checa esos colectores de escape que presumen! Realmente se quieren ver con un JDM en las calles.
Recuerdo cuando ví un AE86 de segunda en Maracaibo, mujer, pensé en comprarlo de inmediato. Era como si hubiera capturado un pedacito de mis sueños de drift. ¡Ganas de tener uno, muchachos!
En Asunción, el tema del Toyota Trueno AE86 siempre es una locura. Mi primo lo coleccionaba, y recuerdo la vibra inigualable cuando lo veías en la calle. Ahora en vez de nuevas conversaciones dice que ya no está, pero el mito sigue. Si encuentras uno por ahí, imagina la emoción. Es como ver un pedazo de historia de los 90, con todo el cariño del mundo de los drift y las carreras ilegales. ¡Verdadero clásico!
¡Qué nostalgia ver un AE86 en Madrid! Recuerdo cuando un miembro de mi grupo de amigos lo pilotaba en la M-30, derrapando con suerte hilada. Esas máquinas te llevan directo a los 90, cuando era impensable no llevar uno si podías. Alguien vendiendo uno de estos es como encontrar una joya. ¡Dale todas las vueltas que necesites, pero no dejes que se te escape!
¡Fuera de Santiago busco un Trueno AE86 de segunda mano! Recuerdo mi abuelo revolviendo desde un taller en una pequeña calle en el centro. Con “Pinta el Macho” aprendí de mecánica con esas pistas de aceleración. El AE86 es un mito en las calles, y es genial ver que la leyenda sigue fuerte. Si alguien tiene uno aparcado esperando que se decida por él, ¡soy todo oídos! Solo falta que me tiren un lanzamiento para entrar a esta banda de culto.