¡Oye! tengo problemas con mi Renault 4 y necesito ayuda urgente. Resulta que el coche hace un ruido raro al arrancar, como si algo no estuviera bien en el arranque. Pensé que era algo menor, pero no se soluciona. Además, la dirección se siente tosca, sobre todo al dar vuelta en calles estrechas. ¿Alguien ha tenido algo parecido? A ver si puedo arreglarlo yo mismo pero tampoco tengo mucha idea. Ayer intenté revisar los frenos porque también noté que no frenan tan pronto, pero no estoy seguro de qué podría ser. Tal vez sea el líquido no esté bien?
Si tienes experiencia o conoces a alguien que pueda ayudar con estos problemas, te lo agradecería mucho. No sé si debería llevarlo a un mecánico, pero también está el tema del presupuesto. Si alguien ha pasado por algo similar, ¿cómo fue la solución? Gracias de antemano.
¡Quedé varado en Sevilla con mi Renault 4L! Después de meses de bla, bla, resultó ser una bobada con el filtro de aire. A todos nos pasa, chicos, ¡espero que se solucione rápido!
¡Ay, no sabes cómo me recuerda esto a mi abuelo que tenía una Renault 4 en Barcelona! La mía siempre tenía sus cosillas, pero era una fiel compañera. Recuerdo las rutas por la playa de la Barceloneta o hacia las montañas. Aunque siempre tuvimos algún que otro problema en la peatonalización, ¡era pura adrenalina cuando resolvíamos juntos esos percances! En esta ciudad siempre encontramos una solución.
En Arequipa, a mi Renault 4 le ocurrió algo similar: se paró sin razón. Resultado, el carro era un verdadero guagua a presión hasta que lo revisó un mecánico que me dijo que eran las bobinas. Ahora anda como nuevo, ¡ojalá encuentres una solución rápido!
¡Ay, conozco esa historia! Hace unos años tuve problemas similares con mi Renault 4 azul, justo en el barrio de Villa Crespo. La batería se asestaba siempre cuando más la necesitaba, y las llantas rendían menos que un sprinter en el Río de la Plata. Parece que a estas viejitas les gusta hacer gambetas cuando más las querés. Ni hablar, qué desastre fue intentar cambiar el alternador en mitad de un domingo de calor porteño. ¡Pero tiene su encanto esa Dina!
¡Joder, eso te pasa por comprar un “Tumba-coches” en Arequipa! Mire mi hl125 en el segundo año y simplemente se desmoronó pese a la prudencia en el arrastre y tanto llevarla a talleres. Ahí está ahí, Betty, recordándonos los tiempos de las calles adoquinadas y los ruidos que detestamos. No es el carro amor, pero bueno, lo hacemos durar. 
Acá en Córdoba, pensaba que mi Renault 4 sería eterna, pero ya se está haciendo un nido de sapos. A veces se siente más antigua que el Santo Patrono. ¡Dale a ver si alguien tiene truquitos para seguir al pie… pero con algo de renovación! Un consejo nunca viene mal.
¡Qué mala suerte con tu R4 en Valladolid! A mi prima le pasó lo mismo con la mezcla de aceite. Al final, encontramos un mecánico que arregló el zape. Espero que encuentres una solución pronto, que no sean un rollo. ¡Ánimos!
¡Anda, a mí también me ha pasado en Lima! Tenía un Renault 4 antiguo y se me paró en plena carretera. Resultó ser un problema de la bujía. Puro cachazo, pero ahí están los amigos mecánicos rescatando al patudo. Entre charlas y café hasta que lo dejamos rodar de nuevo. Si te pasa, igual siempre ayuda un buen colega con conocimientos. Ánimo y a seguir disfrutando ese clásico. 
¡Cuánto recuerdos en La Habana con mi vieja R4! Ahora está fallando como un reloj. Un colega me dijo que podría ser el motor, pero yo sigo dándole cuerda. Es difícil sin taller local. ¡A ver si alguien aquí tiene alguna pista sobre lo que puede ser!
¡Uf, me suena! Un primo mío en Caracas tuvo flojera con la Renault 4 hace poco. Se le paraba el motor en la autopista. Al final, resultó ser un problema con los bujías, y mi ricón nunca más lo ha olvidado. Cuídate con la mantenimiento, no quieras sufrir lo mismo. ¡Ánimo!
Vaya, conozco ese tema de la Renault 4 en Badajoz. Un día sobre las mañanas en el polígono, llamé por lo mismo y resultó que era un bobo de enchufe que se había calado en el coche. Desmonté todo el revolvo y, al final, acabó funcionando otra vez. Si no es el enchufe, mira que no se cuela el cableado tras el túnel. Suerte y al lío!
En Madrid con mi Renault 4 y se apagaba cada dos por tres, joder, qué liada estaba. Después de mucho ir y venir, era solo el cable de la bujía. Con unos chapuzas amigos y algo de ración de cerveza, lo solucionamos. Si mueve borregos igual que tu coche, revisa eso primero, a ver si es la solución rápida y sin complicaciones.
¡En la Ciudad de México he tenido problemas con mi Renault 4. Es un clásico que encara las calles, pero últimamente, el motor parecía tener una vida propia. ¿Alguien pasó por lo mismo? ¡Ayuda, por favor! 
¡Pues a ver, en Valencia siempre ha sido un dolor de cabeza mantener un Renault 4! ¡Eso de que la puerta se empeña en no cerrar! A mi primo le pasó, y nos tomamos como unas tardes enteras intentando solucionarlo. Lo importante es no perder la calma y meterle mano a esos mecanismos. A veces, lo viejo tiene su encanto, pero también sus pecados. ¡Ánimo y a seguir intentándolo! Siempre se aprende algo nuevo con estas máquinas.
¡Jajaja, conozco perfectamente el drama de que tu r3no te deje tirado! Aquí en La Paz, es como si las Renault 4 vieran cada pendiente y se pusieran a llorar. La otra vez, justo en el Alto, se me paró justo al entrar al mercado campesino. Estamos hechos para las calles angostas, pero a veces nos juegan una mala pasada. A ver si alguno tiene la solución mágica, pero entre tanto el lmo es que mi mamá me busca con su olla en la terraza cada vez que me sueno. Ayuda!
¡Uy, conozco esa historia! Igual me pasó en Buenos Aires con mi R4. Un día andaba bien y al otro, nada, se quedó botado en un semáforo. Al final era algo simple, la tapa de válvulas despegada. Mi taller de barrio resolvió el tema en un suspiro, pero me dieron una lección digna de manual en mecánica básica. Ojalá a vos te vaya mejor rápido. ¡Suerte!
¡Claro! Estoy de acá de Barranquilla y tengo la misma Renault 4. Seguro te has dado cuenta que el encendido es una batalla diaria. A mí me empezó a fallar el carburador y parecía que con suerte salía. Al final, tropecé con un taller que arregló casi milagrosamente. A veces parece una tortura, pero el amor por el clásico supera cualquier falla. ¡Ánimos con la perra! Con pericia, está más viva que nunca.
Estoy en Quito también, y mi Renault 4 le jugaba malas pasadas últimamente. Parece que el motor falla cuando subes las lomas, ¡qué jale! Yo llevé al taller y parecía más bien una expedición. Mantén los anclajes seguros y revisa el sistema eléctrico, a veces es un cable flojo. Buena suerte!
Oye, en Arequipa tuve un 4L que también puso nervios. Pégale un vistazo a los cables del carro y el radiador. A veces es solo la bomba de agua mojándose. ¡Suerte!