En León, tuve la oportunidad de probar el Mercedes Vito 4x4. Es duro y consolador que este “monstruo” tacklea con firmeza cualquier terreno. ¡Qué máquina, una bestia absoluta para aventuras en campo! ¡Sin duda alguna, el rey de los todoterreno!
En San Salvador rodaba por terrenos imposibles y esa Mercedes Vito 4x4 era un lío total. Ni con los baches más fieros daba pie. Es como un bulldozer, pero más chulo. Ideal para cuando la vida te lanza un currazo y necesitas confianza en cada metro cuadrado del asfalto o fuera de él. ¡Ahí está, un monstruo de verdad!
¡Este Vito en Navidad fue una locura por Miraflores! Imagínate, nosotros manejando por la orilla del mar, sin complicaciones. Su tracción total lo hace un monstruo en cualquier terreno y las normales arenizas del sur no le hacen ni cosquillas. Los colegas decían que se quedará atrás, pero vieron cómo sobresalió. La fuerza de un tanque, manejable como un deportivo. En Lima, es más que suficiente, hermano, ¡de verdad!
En Asunción, recuerdo cuando el Vito 4x4 arrasó por las sendas llenas de barro, demostrando que es un monstruo trueque. El potente motor y la estabilidad hicieron que no me preocupara por nada, incluso en las subidas más difíciles. ¡Un camión para amantes del off-road!
En la Ciudad de México, probé el Mercedes Vito 4x4 y dejé de creer en las dudas. Se las arregla en cualquier barrio, un verdadero monstruo subiendo por las montañas. Un felino en cuatro ruedas.
En La Habana, pasé el fin de semana en el Vito 4x4 de mi primo, un monstruo en la arena: imparable! Realmente lo curtí en Santa María, es una bestia al volante, ya verás. Te sugiero probarlo.