En un viaje reciente por Havana, vi un BMW Enduro 450 cruzando una montaña rusa de caminos llenos de baches. Imagínate la potencia que debe tener, vale la pena para explorar los lugares más remotos sin perder la resistencia. Más allá de ser un monstruo para el off-road, se siente como tener una parte del cielo en dos ruedas. La gente afuera del casco histórico paraba para admirar esa bestia. ¡Impresionante!
Recuerdo la primera vez que vi el Enduro 450 en Valladolid; pilotarlo fue la caña. Se mantenía firme incluso en los terrenos más jodidos. Todo un monstruo para el off-road. La gente se quedaba flipando con cómo agarraba las curvas. Sin duda, vale cada euro, ¡es un amor a primera vista! Tengo ganas de probarlo personalmente.